lunes, 22 de octubre de 2012

¿Deteminismo o libre albedrío?


Tenemos el poder de crear nuestra realidad? o todo lo que realizamos ya está predeterminado?

En el fondo aunque aparentemente hayan muchos caminos, todos llevan a un mismo sitio, a un único destino que es el camino de retorno a Dios.

Tu personalidad puede decidir si ese camino se hace más rápido o más lento; cuanto más te resistas a tu momento actual, más lento se
rá; cuanto más te abras a ver la vida aceptándola y sin juzgarla más rápido llegarás a él.

Los diferentes coloridos de ese camino en el fondo no son importantes, son parte de la infinitas posibilidades del juego de las formas.

Hasta ahora defendía que mis pensamientos crean mi realidad externa, pero que mi realidad externa, el contexto en el que estoy también pueden crear mis pensamientos. Ahora doy un paso más allá y comprendo, que tus pensamientos no crean tu realidad, ni tu realidad crea tus pensamientos.

Sino que tanto tus pensamientos como tu realidad son una misma cosa en diferentes dimensiones o grados de la realidad, desde lo más sutil a lo más denso. Diferentes dimensiones de una misma realidad, por lo cual se reflejan la una a la otra, por eso crean una realidad fractal. El mismo fenomeno que podemos experimentar cuando nos observamos entre dos espejos confrontados, que cada uno devuelve su reflejo al otro, creando un bucle eterno e infinito.

Entonces si mis pensamientos no crean nada, puedo llegar a camibar mi realidad?

Pues no, tu personalidad no la puede llegar a cambiar, pero el poder infinito creador de Dios, si que puede llevar la existencia a una nueva dimensión de la realidad. Cuando dejas de resistirte a él, y te entregas a la onda creador del Universo.

Es más, por mucho que te resistas, todo lo que tratas de apartar de la Unidad con Dios que eres, te será traído a tu realidad, una y otra vez, hasta que te abras a aceptarlo, y así puedas dejar que el poder creador de Dios pueda seguir reinventándose hasta el infinito.





Tu eliges, si quieres el camino fácil o el camino difícil; tu y los condicionamientos del contexto en el que tu personalidad se ha cocreado. Resistirse a lo que es, lo único que hará es alargar un poco el camino, y hacerlo menos disfrutable, pero al final solo hay un único destino, una única verdad, indescriptible, porque alberga todas las formas, y va más allá de todo lo imaginable.





La vuelta al origen, principio y fin del Camino, el recuerdo del Ser eterno que eres.

miércoles, 17 de octubre de 2012

DINERO Y CONSCIENCIA


Llevamos ya varios años en plena recesión económica, aunque los medios del sistema traten de maquillarla, aportando cifras que en muchos casos la mayoría de la gente no entiende, y tratando de mantener en marcha la locomotora económica creando billetes de la nada.Señales inequívocas, de que nuestro viejo modelo del Mundo ya no da más de sí, y ha de ser cambiado por otro más justo y con unas relaciones entre todas las partes que lo forman más equilibradas. 

 Esta crisis, en el fondo no es simplemente una crisis económica, sino el reflejo en el plano de la materia, de la crisis existencial que experimentamos, cuando la vida nos empuja a transcender los limites, que nos hemos impuesto como identidad individual. En estos momentos que se está elevando la frecuencia de la energía del planeta, y de todo el sistema solar, para poder ascender a una escala más elevada de la realidad, lo que nos tenía anclado al antiguo nivel de consciencia, tiene que ser llevado a la consciencia y transcendido, para poder ser sanado y transmutado. Ante los problemas y desigualdades que han aparecido bajo ese sistema caduco de relacionarse y compartir entre las personas, muchos ven al dinero como el principal responsable de todos los males. Olvidándose de que este en el fondo, es simplemente un elemento de intercambio, un símbolo aceptado por todos, para poder establecer relaciones económicas con los demás.El dinero no es ni bueno ni malo, son las ideas que yo tengo respecto a él, y lo que hago a través del dinero lo que puede producir unos efectos positivos o negativos en el Mundo que me rodea. 

 Desde muchas personas, y en especial desde las atraídas por el mundo espiritual, o de lo denominado Nueva Era, muchas veces se reciben comentarios enjuiciadores sobre el dinero, al que le hacen responsable de todos los males en el Mundo. Estos juicios con el dinero, no es más que un reflejo de los mismos juicios contra la materia (algunos lo llamarán materialismo), que nos inculcaron los que se apropiaron de la verdad religiosa, y nos quisieron transmitir una visión dualista y patriarcal de la vida, dotando al espíritu de todas las bondades de Dios, y al cuerpo físico de todos los males de Satanás. Nuestra relación con el dinero, es un reflejo de nuestra relación con el mundo material, de la relación con nuestro cuerpo, y de la relación con la madre tierra. Cuando testo kinesiológicamente a las personas, muchas veces detecto en ellas, que el hecho de tener dinero, les debilita energéticamente más que el hecho de no tenerlo. Y esto es debido a todas las creencias que nos han inculcado los que ostentaban el poder, de que el reino de Dios no era para los ricos. Para que las personas no tuvieran riquezas y así la Iglesia pudiera seguir acumulando, y creando apologías de la abundancia como el Vaticano.

 La abundancia en sí tampoco es mala, el hecho de que alguien se convierta en una fuente de generar riquezas no es bueno ni malo en sí. Como el hecho de que un conjunto de células reciban más nutrientes e información que otros. Siempre y cuando claro está, esa abundancia que se recibe, luego sea compartida para el beneficio general de todos los demás seres. El hecho de generar abundancia en nuestras vidas, es una manera de ejercer nuestra responsabilidad respecto al Mundo que nos rodea. Gracias a esa abundancia, podemos compartir y generar abundancia en los demás. Abrirse a la abundancia, es ejercer nuestra valentía espirtual, al ser conscientes, que al convertirnos en un flujo atractor de recursos, luego desde nuestra responsabilidad podemos ejercer un efecto mayor, para crear el Mundo más justo que todos queremos. Si queremos cambiar el Mundo en el que vivimos, el dinero y el poder no han de estar siempre en manos de las mismas personas, que ya han demostrado claramente, que no son capaces de gestionar ese poder y esa riqueza en beneficio de todos los seres del Planeta, debido a su bajo nivel de consciencia. Por eso, la actitud de muchas personas que huyen del dinero, al verlo como algo perverso y miserable; además de no solucionar nuestros problemas, los perpetúa pues hace que el dinero y el poder siempre estén en manos de los mismos. 

 La verdadera causa de la crisis económica, es una falta de responsabilidad. Ahí es donde todos los humanos estamos ahora mismo pasando nuestra mayor prueba, en el desarrollo de la capacidad de responder ante nuestras verdaderas necesidades, y las del medio al que pertenezco, como parte de la Unidad que es todo lo manifestado. Y esto es importante, pues mientras que no tengamos presente que somos una Unidad con el todo, evidentemente nuestras necesidades individuales aumentarán, para tapar el miedo al vacío y la soledad, que se produce como consecuencia del aislamiento del Gran Espiritu al que todos los seres pertenecemos. Creer que huyendo del Mundo, rechazando el dinero y el Mundo en el que vivimos, pensando solo en nuestra salvación individual, ya está todo hecho; es un acto tan egoísta e individualista, que el querer seguir perpetúando un sistema injusto para vivir a costa de la riqueza generada por los demás. 

 Si de verdad queremos cambiar el Mundo, huir de él, no va a servir de nada. Hemos de ejercer nuestra parte de responsabilidad en el Plan de la Creación, para posibilitar el salto de consciencia emergente, plasmando en el mundo de la Materia, la nueva realidad emergente. Si todos los que estamos despiertos nos vamos a vivir al campo, huyendo de nuestra responsabilidad con el resto de seres del planeta, esa huida será en vano, porque en un mundo interdependiente como el que vivimos hoy en día. Allá donde vayamos no podremos mantenernos fuera del influjo del resto de los seres del Mundo, pues formamos parte de una misma esencia, en el camino de recordar plenamente la fuente única de la que todo emana. Con esto no quiero decir que la gente no se tenga que ir a vivir a un lugar donde tenga un contacto más pleno con la Naturaleza, evidentemente nuestras ciudades hoy en día están enfermas, y hemos de recuperar nuestra conexión con la Madre Gaia, disfrutando más de sus regalos. Pero sin olvidarnos del resto de seres que aun están en proceso de despertar y que dependen tanto de nosotros, como nosotros de ellos.

Recuerda que en un mundo de símbolos nada es bueno ni malo, el resultado de los efectos de una herramienta depende de tu visión del Mundo, y de tu decisión a la hora de utilizarla. Mientras que el Mundo se siga moviendo a través del dinero, rehuir de él, es dejar de responsabilizarte de tu papel en el cambio que quieres ver en el Mundo. Aunque evidentemente en el proceso hemos de seguir creciendo y evolucionando, y abrirnos también a nuevas maneras de compartir como las monedas sociales.

Algunos quieren volver al trueque culpando al dinero de todo, cayendo en el error de confundir los inconvenientes de un sistema más evolucionado de intercambio, con que ese sistema no sea valido. La teoría de los holones de Arthur Koestler, ya comenta que cada nuevo nivel de evolución al tener mecanismos más complejos para solucionar los problemas del nivel anterior, también puede producir desequilibrios más complejos. Pero eso no quiere decir que tengamos que volver hacia atrás en la evolución rechazando ese nuevo modelo de relacionarnos, sino saltar a un nuevo nivel donde esos inconvenientes sean subsanados. Por eso dentro de muchos movimientos alternativos se recurre a las monedas sociales, pues tienen en cuenta que el tenero un bien de intercambio, que se puede intercambiar por cualquier cosa es una ventaja, cuando dos personas quieren tener una relación de intercambio, y lo que tiene una persona, no satisface ninguna de las necesidades de la otra.Usando los recursos del viejo paradigma de manera consciente, mientras que vamos materializando el nuevo paradigma emergente.